Volver no siempre es retroceder
Reviviendo el viejo blog. Podría haber arrancado uno de cero, pero el pasado es aprendizaje, y un recordatorio para no perderme. Dejé de escribir en el blog, cuando empecé a vivir afuera de mi cabeza, y con el tiempo me di cuenta que el mundo fuera de mi cabeza también merecía ser escrito. No sé con qué frecuencia retomaré este ejercicio,el mundo digital e instantáneo también me atrapo en algún punto, y mis reflexiones suelen quedar flotando en mi cabeza más que en un papel (o en el oído de algún ávido peatón que me escuche hablando sola al pasar). Cambie mucho, pero si hay algo que no cambió, es que escribo como pienso. Bienvenido quien agarre al vuelo mis pensamientos...